Entre guerras ideológicas surge una nación
El surgimiento de una nación es un proceso largo y escabroso y México no fue la excepción. En su afán por imponer su visión del mundo y la política, las facciones desataron guerras civiles, agravadas por invasiones extranjeras. México, como un botín apetitoso para propios y extraños, vivió en un vaivén ideológico en el que no lograba imponerse el deseo del bien común.