En la era del “ábrete-sésamo” parece que los tesoros no tienen medida. Un día alguien dice que puede caminar sin piernas y -para fastidio de los incrédulos- aparece el automóvil. En otro momento, hay quien susurra un sí en México y se estremece el mundo entero en el oído de un africano gracias al teléfono. Ocurre un atentado en Estados Unidos y los asombrados ojos de un australiano ven el hecho en la sala de televisión de su casa.
Disfrazarse de un futurólogo puede costar muchos dolores de cabeza. Los prehistóricos, en cambio, lo tuvieron más fácil: todo era cuestión de acechar la cueva del mamut. Pero existen tecnologías que dan pauta a otras y marcan modos de vida que, para bien o para mal, serán el respiro diario de muchos millones de personas. Y éste parece ser el caso del disco compacto interactivo (CD-I).
PRODIGIO EN CINCO PULGADAS
Parece un viaje imposible, pero el mayor récord lo tiene un curioso: 120 horas de información en un disco de cinco pulgas. Ha logrado pasear por el Louvre y visitar cada sala, disfrutar cada cuadro y escabullirse -de vez en cuando- para conocer de cerca la vida de algunos pintores o ir de puntitas por la historia y creación del mismo Louvre… Y todavía tiene para rato.
La búsqueda de nuevos lenguajes, estilos, efectos y atracción, han creado los “sistemas de interacción multimedia” que invaden el mercado a través de nuevos dispositivos. Son medios en los que se combinan el audio y el video en una variedad de formas, imágenes, gráficas, texto, animación, sonido y discurso que pueden almacenarse en un solo disco.
Esto brinda una nueva opción al usuario: controlar lo que ve y escucha, y transitar dentro de sus programas con la calidad del audio y video digital.
El avance en los medios digitales de almacenamiento es lo que posibilita conjuntar diversos medios de presentación de información en un solo formato. El CD-I es el primer instrumento interactivo que llega a México: un sistema de consumo completo que puede emplearse en forma independiente sin computadora.
Esta nueva tecnología permite experimentar sucesos diversos, muchas veces y de distintas maneras, lo que facilita el acercamiento a un acontecimiento y la aproximación a un tema de forma más integral.
APRENDA FOTOGRAFÍA SIN ROLLOS
Pongamos un ejemplo. Dentro de los títulos educativos existe el curso de fotografía de Time-Life. Una de las clases del disco consiste en fotografiar una lancha en movimiento a alta velocidad. El objetivo es fotografiar el bote preservando los detalles del fondo sin dejar de mostrar la velocidad que lleva la lancha. El futuro fotógrafo selecciona la velocidad del rollo -que es simulado en la pantalla- y dispara cuando lo cree conveniente; en pocos segundos aparece una imagen congelada que muestra los resultados de la fotografía que tomó y explica si la elección fue la correcta o no. Si no lo fue puede preguntar al CD-I en qué falló.
El disco interactivo es similar en apariencia, diseño y operación al compact disc de audio. El reproductor de CD-I es fácilmente conectado a cualquier televisión o equipo de audio.
Entre sus características se encuentran la capacidad de almacenar 250 mil páginas de texto, más de 7 mil imágenes con calidad fotográfica, 72 minutos de video y 19 horas de discurso. En 5 pulgadas de un disco plateado se almacena la información de una computadora; usa menos memoria que ésta y, por lo tanto, puede almacenar y reproducir más video.
El CD-I procesa información de un disco Óptico de 650 megabytes y registra una paleta con 16 millones de variaciones de color y cuatro planos de efectos visuales. Posee acceso a más de 16 pistas de lenguajes en un solo disco con cuatro calidades de sonido: CD-DA (compact disc digital audio), Hi-Fi, Mid-Fi y discurso.
El CD-I dificulta, en cierta medida, su piratería, porque aunque se puede grabar el audio por un lado y el video por el otro, la copia no permite la interacción a través del control manual.
Uno de los grandes aciertos de este sistema es que el CD-I es el estándar mundial para un sistema interactivo (al igual que el disco compacto, por ejemplo). Esta ha sido una de las mayores contribuciones para su éxito. El estándar garantiza que los discos podrán reproducirse en cualquier reproductor de CD-I, de la marca que sea, en cualquier lugar del mundo.
PROBLEMAS DE COMPATIBILIDAD
Philips ha tomado medidas globales que garantizan la compatibilidad del CD-I con tecnologías ya existentes o por desarrollar. Es compatible con: el compact disc de audio, con discos de 3 ó 5 pulgadas, el compact disc Rom-Xa «bridge», y con Photo-CD de Kodak disponible en México. (Este último es un servicio que consiste en el procesamiento
de una película fotográfica de 35 mm. cuyas imágenes son leídas, convertidas a números e inscritas en un disco compacto fotográfico por medios electrónicos. El Photo-CD de Kodak permite el almacenamiento y conmaaón de fotografías y sonido en un disco compacto similar al del audio y con capacidad para 100 imágenes. Un “álbum” audiovisual al gusto de cualquier nostálgico).
En cuanto a imagen, el CD-I es superior al formato VHS de las videocassetteras (VCR’s). En video presenta gráficas, texto, animación e imágenes fijas y, posteriormente, tendrá video en movimiento (full motion video).
En lo relativo al audio, el reproductor de Philips combina música y discurso con la calidad del disco compacto de’audio en sonido monoavial.
El CD-I se relaciona con las computadoras por su capacidad de almacenamiento que resulta semejante a los discos de computadora CD-Rom Xa; sin embargo, difiere del sistema (multimedia) en computadora, porque aunque posee las mismas capacidades, el CD-I tiene un sistema integrado que, aunque ofrece un número muy extenso de opciones, debe jugarse como ha sido programado.
Es similar a los video-juegos pues los dos permiten la interacción de los usuarios con los programas, aunque es mayor la del CD-I. pues sus discos al almacenar tanta información como la de una computadora, brindan mayor número de opciones a elegir; independientemente de la orientación educativa de algunos títulos del CD-I que incorporan un nuevo uso que los video-juegos nunca han ofrecido, fomentan el aprendizaje y, por lo tanto, son capaces de influir en la educación.
CD-I PARA RATO
La educación es un área donde el CD-I puede contribuir como herramienta directa. El usuario aprende con ejemplos no sólo textuales, sino gráficos, auditivos y visuales en cualquier materia. Su captación del conocimiento es sensorial y simultánea.
Para garantizar la variedad, calidad y creatividad de software, para el CD-I, PIMA (Philips Interactive Media America) desarrolla sociedades y acuerdos con compañías de entretenimiento, grupos editoriales, compañías de software para computadoras y otras instituciones para elaborar nuevos títulos y adaptar los ya existentes al formato CD-I.
Philips ha introducido ya más de 50 programas e software que se clasifican en cuatro categorías: infantiles, juegos, música y actividades.
Imagine que enciende su televisor, coloca su CD-I en un reproductor especial, y un menú en pantalla -que se maneja por un sencillo control remoto- lo llevará a visitar los Museos Smithsonianos, por ejemplo. Usted puede elegir cuál de ellos visitar, a qué sala ir, y realizar consultas ya sea por temas, índice alfabético o nombres, y al mismo tiempo, escuchar las explicaciones de un guía, mientras ve las imágenes de los temas elegidos.
Actualmente existen en el mercado muy pocos títulos en español: algunos infantiles y otros dedicados al aprendizaje de idiomas, además del disco del Museo Amparo de Puebla. Pero muchos títulos se presentan en varios idiomas con traducción inmediata.
Desde la introducción de la televisión en los 40-50 hasta el surgimiento del compact disc en 1982, las innovaciones tecnológicas seguirán revolucionando el entretenimiento familiar en el hogar.
En Philips, la inversión para investigar y desarrollar nuevos productos es el 8% de sus ingresos anuales. Esto explica que entre sus inventos se encuentren el audio cassette, el video laser y el compact disc. El disco interactivo tiene como abuelos al disco compacto, al video laser, CDRom y al DOR (Digital Optical Recording).
El lanzamiento del CD-I se realizó en el otono del 91 en los Estados Unidos y México fue el segundo país en donde se probó a nivel mundial. El reproductor está a disposición en todos los grandes almacenes que venden enseres electrónicos desde el pasado mes de abril. La carrera ha comenzado…
