La emperatriz del adiós
Miguel de Grecia
Plaza y Janés. Barcelona. 1999, 347 págs.
«La realidad mexicana se compone de elementos contradictorios pegados sabe Dios cómo, y esto es lo único que permite circunscribirla». Con esta frase de José Luis Blasio, secretario particular del emperador Maximiliano, Miguel de Grecia (pariente lejano de sus «majestades mexicanas») enmarca una biografía algo novelada de la emperatriz Carlota y los avatares de su mal logrado imperio.
Gracias a sus investigaciones (y parentescos), el autor logra sacar a la luz las cartas de Carlota Amelia, escritas durante su locura y celosamente guardadas en el archivo Goffinet de la casa real belga. Esto le permite llenar algunas lagunas y misterios históricos de la soberana, quien sobrevivió sesenta años a su imperio y aún sigue presente en la realidad contradictoria de México.
Cabe mencionar que la visión del libro no supera el mito que los europeos han formado acerca de nuestro país, por lo que algunas observaciones quizá tengan, para nosotros, un tinte irreal.
