Balduino. El secreto del rey

Balduino. El secreto del rey
Cardenal Suenens
Espasa Calpe. España. 1996, 198 págs.

El rostro que ocupa la portda, cautiva de inmdiato: un hombre de mirada serena. Es la foto de Balduino, Rey de Bélgica. Página a página, la historia de este rostro confirma que nos encontramos ante un ser extraordinario que, con humildad y espíritu de servicio, ejerció durante 42 años el auténtico arte de gobernar. El libro está compuesto con notas de su diario y archivos personales, así como testimonios de quienes lo conocieron de cerca o, sin conocerle, admiraron su rectitud y ejemplo.
“El secreto de la vida del Rey no hay que buscarlo lejos: reside en la profundidad de su vida espiritual. Dicho de otro modo, en su unión con Dios, vivida en cristiano, día a día, y traducida en gestos cotidianos de servicio a los demás”. Con esa sencillez y claridad, el Cardenal Suenens, su amigo durante 33 años, revela la fuerza que impulsaba a Balduino.
Los textos seleccionados por el Cardenal, descubren la serenidad con que Balduino afrontaba desde los conflictos de Estado hasta las pequeñas contrariedades de cada jornada. Consciente de los riesgos que acompañan el ejercicio del poder, eligió la prudencia como principio rector de todas las decisiones de gobierno. “El peligro que nos acecha es el halago. Necesitamos tratar con personas que se atrevan a contradecirnos y a detener nuestros proyectos cuando así lo merecen. Señor, rodéanos de personas de temple y rectitud, y haz que aceptemos la contradicción”.
Sin deslumbrarse por los encantos de la vida palaciega. Balduino conservó la sencillez para actuar contrandeza sin perder de vista los pequeños detalles, preocupado siempre por las personas que lo rodeaban.
En 1990 el Rey asombró al mundo por su férrea decisión de negarse a firmar una ley sobre el aborto cuya ambigüedad y consecuencias parecían inaceptables. Alegando motivos de conciencia, Balduino aceptó que el gobierno decretara su incapacidad temporal para gobernar. Una vez, promulgada la ley, y en medio de una fuete polémica, el Parlamento le devolvió sus atribuciones constitucionales. Consciente de que esta decisión podría haberle costado el trono o, por lo menos, la sustancial reducciín de sus facultades de gobierno, Balduino se mantuvo firme en la defensa de sus convicciones.
El inicio de la homilía del Cardenal Danneels con motivo del fallecimiento del monarca (31 de julio de 1993), resume la mística de Balduino desde su ascenso al trono, a los 21 años de edad: “Hay reyes que son más que reyes: son lo pastores de su pueblo. Hacen mucho más que reinar: aman hasta dar su propia vida. Así fue el Rey Balduino. Sabía amar. Su inteligencia política hundía sus profundas raíces en el corazón; su competencia profesional procedía de su fuerza de amar. El secreto de su reinado era el corazón”. Y ese corazón, trazado en tinta y en papel, es el tesoro del que podemos adueñarnos con la lectura de esta obra llena de esperanza.

istmo review
No. 386 
Junio – Julio 2023

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