Amélie Nothomb
Anagrama. Barcelona, 2012
152 págs.
Descubrí a Amélie Nothomb (Bélgica, 1966) de modo muy común, en una librería de la ciudad de México. Desde aquel encuentro hasta la lectura primera de uno de sus libros, pasaron dos años. Su escritura sarcástica y autobiográfica unida a su prosa amable, la dotan de un toque singular. Además de ser una mujer de mundo (vivió en Japón, China, Laos, Birmania, Estados Unidos y Bangladés) es asidua escritora, capaz de dar a luz a varias novelas al año, aunque no todas llegan a publicarse.
Sus textos recientes son de amor y de realismo mágico, pero Una forma de vida no pertenece a ese elenco. Se trata de un intercambio epistolar entre la autora y un soldado americano destinado a Irak. El militar narra los horrores de sus circunstancias, el ambiente laboral del ejército, la comida, la soledad, el vacío, el engaño, el poder, el hambre, etcétera. Nothomb irá descubriendo la verdad detrás de la tinta por medio de respuestas agudas y precisas.
Severa crítica social a través de una historia dura. Un relato sencillo con un trasfondo complicado en el cual se aprecian las consecuencias de una realidad desfigurada por una mentira o viceversa.