Francisco L. Urquizo Factoría Ediciones. México, 2010 312 págs.
Espléndida novela de la Revolución, que nos muestra el otro lado de la moneda, es decir, a partir de la vida de Espiridión como soldado raso recogido en la leva del Ejército Federal, en castigo de una provocación al mayordomo de la hacienda donde era peón, en la región Lagunera. Su pleito de borracho le valió cinco años de soldado.
Espiridión narra la historia en primera persona; muestra la rudeza y corrupción del Ejército Federal. Alguien le cuenta de un tal Madero, «chaparro entrón»; pero un soldado como él no entiende de política: es sólo carne de cañón.
Al poco tiempo estalla la Revolución y lucha contra los insurrectos. El autor, como buen militar, narra con realismo cada batalla con sus horrores.
Hay escenas magistralmente descritas como la Decena Trágica, donde describe el enfrentamiento del general Villar con Bernardo Reyes frente a Palacio Nacional, o la del «bautizo» del hijito de su compadre, por mano de Otamendi, el soldado periodista, quien hace un discurso memorable. La novela es altamente humana, con lenguaje de cuartel y un rico material autobiográfico.