Soy director de una ONG en Sinaloa. Nuestros estatutos dicen que no se debe contratar personal con vínculos familiares. Sin embargo, uno de los empleados más antiguos y eficientes trajo hace un año a su hermano quien después de trabajar unos meses como voluntario, fue contratado, por ser también una persona comprometida y trabajadora. Recientemente las empresas que nos patrocinan solicitaron una auditoría en nuestra organización. Haber violado los estatutos pone en peligro a nuestra ONG. ¿Debo despedir a alguno de los hermanos para evitar la sanción o explicar la situación a los auditores?
LOS ASESORES SUGIEREN
Las reglas que la sociedad y las instituciones vamos construyendo y aceptando, nos sirven como referente y guía para nuestro buen funcionamiento; respetarlas es tener la seguridad de que las cosas y las relaciones tendrán un cierto orden.
Al contratar al hermano de este empleado (independientemente de su calidad moral) y con pleno conocimiento de que se violaban unos estatutos se cometió una falta grave por parte de la institución. Esto debido al mensaje de que es posible no cumplir las reglas de la ONG según sea el caso.
Ahora bien, me parece que habría que hablar con las empresas patrocinadoras, explicarles la situación y resultados de esta persona, y someterse a su decisión. Me parece que se puede entender la contratación si se explica claramente la intención. En cuanto a la regla, yo la modificaría para poder hacer excepciones como en este caso.
Rodrigo Villaurrutia
Profesor de Ética de la Empresa
La existencia de esos estatutos suele responder a la experiencia acumulada de lo que funciona mejor en ese tipo de empresas, pues es fácil caer en complicidades cuando hay nexos tan cercanos y fuertes de familia en una organización.
Por eso el hermano nunca debió ser contratado si en verdad el riesgo era la misma desaparición de la ONG. Esto debe evaluarse a la luz de la importancia de ese estatuto en el conjunto de la estructura de la organización. Es posible que la mejor solución sea despedir a uno de los hermanos.
Armando Reygadas
Abogado especialista en Ética de Empresa
