Los «Brain Gyms» –gimnasios para el cerebro– se extienden como setas, resultan un negocio floreciente y, a pesar de que aún no cuentan con el respaldo unánime de la profesión médica, son muy frecuentados por los mayores.
Los gimnasios mentales ofrecen computadoras con programas informáticos sencillos, que entrenan las capacidades visuales, auditivas y de memoria, mediante juegos y pasatiempos diseñados para mejorar la agudeza y agilidad. Los ejercicios también pueden practicarse en clubes deportivos, balnearios y centros de vacaciones, donde se combina la actividad física y mental.
Las firmas productoras del software apoyan sus aplicaciones en un descubrimiento científico reciente: la neuroplasticidad, la capacidad del cerebro de renovar sus conexiones a lo largo de la vida, como resultado de una mayor actividad mental. La comunidad médica divide sus opiniones entre la prudencia y el rechazo. Algunos científicos consideran la moda, una respuesta al temor de padecer demencia o Alzheimer.
Más de 700 centros de jubilados cuentan con el sistema, lo que genera resultados económicos positivos a un pequeño grupo de empresas con nombres sugerentes: Happy Neuron Inc. o Cognifit Ltd. Naturalmente, siempre cabe entrenar el cerebro en casa, al descargar programas gratuitos de internet.
The Wall Street Journal
3/IV/09
